Sillas Vacías

 

 

 

Porque donde estén dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.  (Mateo, 18:20)

Generalmente nos sentimos tristes y desanimados, cuando vemos muchas sillas vacías en el salón de reuniones.

No queremos ver sillas vacías, y nos esforzamos buscando la manera de conseguir que no haya ninguna silla vacía, en cada una de nuestras reuniones.

Nos preocupa el desinterés de la gente por las cosas de Dios.

Pero quizá no sea esto lo que mas le preocupe al Señor, sino que los pocos que ocupan las sillas, estén ellos mismos vacíos.

Porque si los que ocupan las sillas, están vacíos, difícilmente las sillas vacías podrán ser ocupadas.

Velad debidamente, y no pequéis; porque algunos no conocen a Dios; para vergüenza vuestra lo digo. (1 Cort. 15:34)

 

¿Podrías pensar en ello? 

 

 

2 comentarios sobre “Sillas Vacías

  1. Mi hija y yo somos dos…Le gusta que le explique la letra de las canciones además de cantárselas, podeis haceros una idea de los ratos que pasamos. Gracias al SANTO DE ISRAEL

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